divendres, 11 de novembre del 2016

EJECUCIONES POR SODOMÍA EN LA BARCELONA DEL SIGLO XVII

Se conocen muy pocos casos de ejecuciones por el denominado pecado nefando (sodomía) en la Barcelona medieval o moderna, todos ellas fueron en períodos convulsos: peste, guerra o revueltas .....


Hasta 1524 Catalunya no tiene una competencia clara para condenar la sodomia. Ni los primeros Usatges, ni las posteriores Constituciones la condenaban. Cuando se quería una sentencia en este sentido se tenía que recurrir a las viejas leyes romanos, especialmente las de la época de del Emperador Teodosio que conllevaban la pena capital.

Hasta finales del siglo XIV no se conocen casos de sentencias de muerte. Con la llegada de la peste se producen las primeras ejecuciones, el rabino Isaach Mardofay fue la primera víctima. En este caso seguramente su condición de judio fue más la causa que unos hechos mas bien confusos. Durante el reinado de Joan I siguieron varias ejecuciones.

La siguiente época negra fue la guerra civil con Joan II Trastàmara. En este caso la víctima fue Joan de Llobera y su supuesto amante un desdichado ermitaño. Joan era representante del brazo eclesiástico del Consell de Cent de Barcelona, por lo que su ejecución levantó la ira de este sector.





Ante esta ambigüedad jurídica, Carlos V impone la competencia de la Inquisición en la persecución de la sodomía en los territorios de Aragón, Catalunya o València. En Castilla no hacía falta, las leyes castellanas eran muy claras en esta persecución.

Pero la aplicación de las condenas no fue cosa fácil. Los inquisidores eran castellanos y sus métodos, además, chocaban con las costumbres de estos territorios. Los códigos eclesiásticos no contemplaban la pena capital, solo penas de reclusión para los eclesiásticos o excomunión para los laicos. Por ello sus penas debían ser ratificadas por los tribunales civiles, la condena máxima era la de "relajación" un eufemismo que significaba la pena de muerte. El reo tras ser condenado debía ser entregado al "brazo seglar" para cumplir la sentencia. Los jueces se basaban en la ambigüedad de las leyes para oponerse a estas sentencias, por ello normalmente eran enviados a galeras.

Felipe II intentó solucionar este problema modificando las Constituciones de Catalunya en 1585. Por primera vez las leyes catalanas condenaban el pecado nefando. Pero la justicia siguió poniendo trabas, en el fondo no aceptaba la intromisión de los inquisidores castellanos. Sólo un breve período de entendimiento entre 1607-1609, anterior a la nefasta expulsión de los moriscos, y el período de la Guerra del Segadors.





Las primeras víctimas de 1607 eran napolitanos, considerados extranjeros, y marineros, oficio siempre sospechoso de sodomía. Miguel Fogas, patrón de un barco napolitano, fue acusado de mantener relaciones con varios muchachos de 14 años, al igual qu Joseph Parmesano. La sentencia señala que las relaciones fueron a la fuerza y a cambio de dinero. Aunque la sentencia era ser quemados, en Catalunya se les estrangulaba (garrote) antes para evitar el horrible sufrimiento. En este caso la sentencia se aplicó sin presencia pública "para evitar revueltas populares". 





Las siguientes fueron en 1609. Los tres reos fueron acusado de sodomía (2) y bestialismo. Pocos días antes de iniciarse la terrible expulsión de los moriscos. El juicio fue contra 6, pero solo tres se les aplicó la pena máxima. Los acusados de sodomía eran extranjeros: Francisco Gayta, napolitano, y Antón de León, andaluz. Al tercero, de Vic, se le acusó de mantener relaciones sexuales con los caballos. Las ejecuciones tampoco fueron públicas.

No hay nuevos casos hasta 1647, durante la Guerra de Separación (dels Segadors), época en la que los inquisidores no dependían del Consejo Supremo de Madrid. Solo hay constancia de la ejecución de Sebastià Barata, tintorero de Barcelona. Junto a él fueron "relajadas" varias mujeres bajo la acusación de "hechiceras". En este caso se hizo en público, en el Born. Sebastià fue muerto por garrote, después quemado y las cenizas desparramadas. Fue seguramente la última víctima ejecutada en Barcelona por el delito de sodomía.




Durante esta época, y fruto del conflicto de competencias, la inmensa mayoría de casos sueron sentenciados a galeras. La cifra puede estar en unos 350 casos conocidos entre 1524 hasta finales del siglo XVIII. 


Bibliografia.

Jaume Riera, Sodomites Catalans. http://www.editorialbase.cat/llibres/289
Rocío Rodríguez   Sodomía i inquisición   http://www.ushuaiaediciones.es/libro-sodomiaeinquisicion.html
Rafael Carrasco. Inquisición y represión sexual en València  http://www.casadellibro.com/libro-inquisicion-y-represion-sexual-en-valencia/9788475840482/396659


1 comentari:

  1. Molt interessant aquest apunt pel que suposa de resum d'una bibliografia molt exhaustiva i especialitzada.

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